Más que pato, patoso

En el año 2004 llegaba un fenómeno al siempre controvertido equipo Atlético, que por aquel entonces entrenaba César Ferrando, entrenador que se estrelló como entrenador en el club colchonero. El Atlético se hacia con los servicios del jugador uruguayo Marcelo "Pato" Sosa. Nacido en 1978, en Uruguay, llegaba procedente del Spartak de Moscú. Este jugador, con una melena rubia de bote mas que llamativa, escandalizaría al mas fino de los estilistas.

El "Pato", era un jugador de una técnica digamos más que dudosa, pero con mucha garra, bueno si se puede llamar así, puesto que su exceso de ímpetu le costó más de un castigo, dado que siempre se excedía en las entradas. De escaso potencial futbolístico, fracasó estrepitosamente en el Atlético de Madrid que lo acabó cediendo al Osasuna, donde tampoco se comió un colín, y donde fue suplente hasta del utillero.

Pero al "Pato" lo que se le recuerda, fue cuando el día de su presentación como jugador del Atlético de Madrid, le pidieron que diera unos toques y al dar el segundo se cayó de culo, dando con su extravagante melena rubia de bote contra el suelo, a lo que muchos asociaron que lo de pato era por patoso, aunque obviamente, su apodo, no era por eso. También la lió calentando un derby contra el Real Madrid, aunque luego en el campo pasó con mas pena que gloria.

Se fue a River y a su país. En 2010, jugando con Peñarol, ya sin su oxigenada melena rubia de bote, la lió en un amistoso contra el Real Madrid, despeinando a Cristiano Ronaldo. Y es que el amigo "Pato" jugar al fútbol lo hacia poco pero repartiendo estopa era un numero uno. Actualmente exhibe su natural talento para dar cera y pulir cera en el Racing Club de su país, Uruguay. Aquí lo recordaremos como uno de los top ten de la lista de pufos. Por cierto, no se pierdan el video de su presentación con el Atlético de Madrid, cuando se cayó de culo.