Iván "Bam Bam" Zamorano

Pocos jugadores han tenido la capacidad para elevarse sobre los defensas rivales, para ante sus narices rematar de cabeza. Pocos jugadores han tenido también la capacidad de reventar las redes rivales como el protagonista de este nuevo articulo de colgados por el fútbol. Hablamos de un icono del fútbol chileno y muy recordado por hinchas de muchos clubs, entre ellos los del todopoderoso Real Madrid. Hablamos como no podía ser de otra forma, de Iván "Bam Bam" Zamorano.

Iván Luis Zamorano Zamora, nació el 18 de enero de 1967, en su Chile. Comenzaría su carrera muy pronto, en 1985, demostrando su capacidad de perforar las redes rivales, lo hizo en Chile. Su buen hacer durante sus primeras temporadas profesionales, hicieron que en solo tres años diera el salto al fútbol europeo, concretamente al Bolonia, al que fue vendido en 1988, pero no llegó  a jugar en el club italiano pues fue cedido al ST Gallen suizo, donde tras unas grandes actuaciones, fue comprado por el club suizo en el que permanecería dos temporadas, hasta 1990.

En Suiza, "Bam Bam" continuó goleando y tras anotar 37 goles en la liga suiza fue fichado por el Sevilla, especialista  muchas veces de fichajes rentables. En Sevilla jugó desde el 90 al 92, siendo uno de los delanteros referencia de la liga española, lo que le valdría para fichar por uno de los todopoderosos del fútbol mundial; El Real Madrid.

Allí Zamorano, permaneció durante cuatro temporadas, desde 1992 hasta 1996, donde tendría sus momentos buenos y malos, pero donde quedaría para siempre recordado como un ídolo para la exigente parroquia madridista. Y es que durante su primera temporada, Iván marcó goles, pero la segunda, la de 1993-94, tuvo un rendimiento bajísimo, dejando su temporada en solo 11 goles en liga  y dos en el resto de competiciones, algo que para un delantero de su nivel y por consiguiente del Real Madrid, planteó serias dudas sobre si su nivel era el adecuado. 

Esto le valió, para que en el verano de 1994, con la llegada de Jorge Valdano al Real Madrid, se le declarara transferible junto a un recién llegado Emilio Amavisca. Cosas de la vida, ningún equipo se interesó por ellos lo suficiente, lo que hizo que ambos se quedaran en el Real Madrid. Esto fue posiblemente una de las mejores cosas que le pasó al equipo del Bernabéu en su historia, pues ambos jugadores fueron las estrellas de un Real Madrid, que recuperaba su trono en la liga después de 5 temporadas, con un Zamorano que acabó Pichichi con 28 goles gracias a las múltiples asistencias de Amavisca. Zamorano fue nombrado al final de esa temporada mejor jugador extranjero y Amavisca mejor jugador nacional.

De esa temporada, lo que mas se recuerda de Iván, fueron sus tres goles al Barcelona y su gol al Depor, que hacía campeón de liga al Real Madrid en junio de 1995. La siguiente temporada no fue buena ni para el Real ni para el, pues el conjunto blanco, en un hecho sin precedentes e impensable hoy en día, no consiguió ni clasificarse para Europa, quedando en un triste sexto lugar, que por aquel entonces no daba pase a competiciones europeas.

En 1996 se fue a otro grande del fútbol europeo, el Inter de Milán. Alli "Bam Bam" comenzó el declive de su carrera, si bien permaneció durante cinco temporadas, aunque con unos números goleadores y de minutos mas discretos  actuando como suplente muchas veces. Cabe destacar la curiosa anécdota que se dio en su paso por el Inter, y es que en la segunda temporada de  Ronaldo en el  club italiano, la marca Nike, patrocinadora del astro y del equipo italiano, exigió que este llevara el 9 en su zamarra, que llevaba Zamorano. Si bien en su primera temporada en el Inter, Ronaldo había llevado el 10, en su segunda, dado que se estaban comercializando unas botas Nike con el sobrenombre de R9, "Bam Bam" tuvo que ceder su querido dorsal al astro brasileño. Entonces eligió el 18, al cual le puso un + entre medias, formando un original 1+8.

Después de su etapa italiana, se fue a Mexico, al America, donde permaneció varias temporadas y acabo jugando en el Colo-Colo de su país donde se retiro en 2003. Internacional por Chile, fue mundialista en 1998 formando una letal pareja con otro icono del fútbol chileno, Marcelo Salas. También fue medalla de bronce en Sidney 2000, donde anotó 6 goles. En toda su carrera incluyendo partidos de segunda división y los internacionales marcó 348 goles en 665 partidos.

Delantero letal con un remate prodigioso, fue uno de los mejores rematadores de cabeza que se recuerda en el fútbol moderno por lo menos. Con un potente salto de cabeza que compensaba su corta estatura (1,76) y un manejo del remate con ambas piernas que hacia de el un delantero muy oportunista. Temperamental y con mucha garra, Iván fue uno de los grandes delanteros del fútbol mundial durante muchos años.

Actualmente se dedica a sus negocios, siendo el dueño de varias companias valoradas en bastantes millones de euros y participa en muchos actos benéficos, casado con la modelo Maria Albero con la que  tiene dos hijos.